Productos de temporada: uva, borraja y percerbes

Uva: para consumir en todas las etapas de la vida

Bien sabemos que la uva es el ingrediente principal del vino y que la mayor parte de su uso está destinado a la elaboración de estos caldos y mostos. Aún así, es ideal para consumir en fresco y cruda por su sabor y facilidad para comer. Nos aporta un alto nivel de minerales y vitaminas muy beneficiosas para el organismo y para mantener un estilo de vida saludable. Además, su aporte calórico no es muy elevado.

Actualmente existen unas 3.000 variedades de uvas en el mundo, algunas más apreciadas que otras por sus propiedades y su forma de consumo. Para facilitar su clasificación, los expertos han elaborado dos grupos: las de mesa, para consumir como fruta normal o como uvas pasas y, las viníferas, que se emplean para la elaboración del vino.

Y es que Hipócrates, el padre de la medicina, ya la calificaba como el alimento más completo y aconsejable en todas las etapas de la vida.

Borraja: como remedio natural para algunos dolores

¿Sabías que la borraja es una planta medicinal excepcional? La expresión “queda en agua de borrajas” nos puede llegar a dar la impresión de que no es una verdura que satisfaga demasiado, pero nada más lejos de la realidad.

Siempre se ha consumido de forma fresca, muy habitual en la Ribera Navarra, pero también como un remedio natural en forma de infusión para algunas enfermedades como la irritación de garganta, para combatir la gripe y la fiebre, para pieles irritadas y envejecidas o para depurar el organismo.

En Mercabilbao es bastante fácil encontrar borrajas en los pabellones de Fruta y Hortaliza por lo que si las solicitas en tu frutería de confianza podrás conseguirlas de forma muy fácil.

Percebes: ¿Cocidos o a la plancha?

Los percebes son un auténtico manjar, uno de los mariscos más apreciados de la Península Ibérica, más por su sabor que conquista cualquier paladar que por su aspecto tan característico.

Actualmente, los percebes se recolectan de forma salvaje y no es posible criar este tipo de marisco. De ahí su precio es tan elevado pero su calidad no defrauda y en encuentros gastronómicos especial es bastante habitual encontrar un puñado de ellos en la mesa.

Los más cocinillas los cuecen para consumir, aunque ya hay quien los prefiere a la plancha con un chorro de aceite. Eso sí, lo ideal es consumirlos calientes o templados para apreciar mejor el sabor del mar. Por ello, generalmente se cubren con un paño antes de servir en la mesa, para que no pierdan el calor.